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¿Alguna vez han intentado contar las estrellas? Yo sí, de adolescente era una de mis actividades favoritas por las noches, (siempre he sido media cursi y era algo que me gustaba hacer), en mi antigua casa abría mi ventana y sentada en el borde de ella las veía y contaba.
Tarde o temprano me daba por vencida y lo dejaba, y es que contar todas las estrellas simplemente no es posible, son miles de ellas, jamás terminaría, pero ahí están...
Dios hace algún tiempo sugirió a un gran hombre que intentara contarlas: Abraham. Y usó esto para darle un ejemplo de lo mucho que iba a hacer en su vida, de la promesa que cumpliría.
 
Génesis 15:5 dice: "Y lo llevó fuera, y le dijo; Mira ahora los cielos y cuenta las estrellas, si las puedes contar. Y le dijo: así será tu descendencia"

 

 

"Tratando de contar las estrellas..."

Pensemos entonces en cada estrella como una bendición, como un regalo de Dios para con Abraham, pues cada una representaba el cumplimiento de su pacto, de su promesa.
 
En nuestra vida podemos verlo de la misma manera, día a día recibimos bendiciones, pequeños y grandes regalos de Dios: la vida, familia, amigos, trabajo, estudios, un techo para dormir, abrigo, sustento, salvación... Estas estrellas que son bendiciones, por alguna "razón" a veces las dejamos de contar, las dejamos de ver y de apreciar. Pues al igual que un cielo estrellado nos parece lo más normal, así las bendiciones que Dios ha traído a nuestra vida pueden pasar desapercibidas, olvidando así que son parte del cumplimiento de lo que Dios nos ha prometido.
 
Muchas veces nos enfocamos en lo que no tenemos, en lo que Dios no ha cumplido aún, y dejamos de ver lo que ya hizo y lo que hace cada día. Porque quizás deberíamos poner más en práctica lo que nos dice Filipenses 4:11 "He aprendido a contentarme con lo que tengo"
 
Lo que Dios nos ha dado ES suficiente, porque así lo piensa Él y aunque a veces no lo entendamos y aunque a veces nuestro corazón sienta lo contrario, Dios te ha dado y me ha dado a mí más de lo que merecemos, tus bendiciones y las mías son como las estrellas de la noche más despejada de verano, así de brillantes y así de reales.
Pero si no las vemos, y empezamos a enfocarnos en lo que no está, esto tarde o temprano podrá convertirse en una excusa para alejarnos de Él o para frustrarnos porque nos parece que nunca será realidad lo que tanto anhela nuestro corazón.
 
 Génesis 5:6 dice que cuando Dios habló con Abraham, este le creyó: "y creyó a Jehová, y le fue contado por justicia"
 
Abraham confió en Dios, y nosotros ¿le creemos? No sé cuales sean tus peticiones, yo tengo una buena lista, y Dios las conoce pero mientras él responde sea sí, no o espera, no dejemos de tratar de contar las estrellas... intentemos contar las bendiciones que nos ha dado: reconozcamos su amor cada día, cada hora, por ejemplo cada año de vida que tengas representa algo, que podás estar leyendo esto: significa que podés leer, podés ver, eso por supuesto que es una bendición! 
Trata de ver esos detalles y agradecelos, agradezcamos a Dios por su fidelidad, por sus promesas y así como Dios dijo a Abraham me atrevo a escribir que siento que Él nos dice:
"Mirá las estrellas y cuéntalas si puedes, así es como te bendeciré con mi fiel promesa"
"Sin embargo, como está escrito:
Ningún ojo ha visto,
ningún oído ha escuchado,
ninguna mente humana ha concebido
lo que Dios ha preparado para quienes lo aman"
1 Corintios 2:9
 
Sofi :)
Sofía Tinoco Torres
 
 
 
 

 

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